Muchos nos estuvisteis acompañando durante el «maratón» del pasado 10 de Mayo en el canal de youtube de @imgende. Marta Tourón (@martatouron) y yo, participamos en una de sus célebres #CharlasEducativas, ¡la 124 ya! Este espacio de aprendizaje informal se ha consolidado como un espacio de formación docente alrededor del cual se conforma un #claustrovirtual ávido de compartir, aprender, innovar e impulsar una educación de calidad, centrada en el alumno.
Tocaba hablar sobre #altascapacidades y lo hicimos durante nada menos que ¡3 hrs. y media! No era el plan inicial, pero es un tema complejo al que es necesario dedicarle tiempo para abordarlo con todos los matices y profundidad que merece. «Aligerarlo», supone casi siempre enviar un mensaje erróneo que revierte negativamente en los alumnos por los que trabajamos.
La propia celebración de esta #CharlaEducativa es, en sí misma, una lección de cómo estimular el potencial, el de todos.
Entorno:
Ingrid Mosquera @imgende, crea el entorno, ofrece las herramientas, elige un tándem que intuye, puede ofrecer sinergias positivas, dos perfiles diferentes, pero complementarios que comparten compromiso, nivel de implicación y capacidad para aportar al objetivo
Reto:
Propone un reto complejo. Una serie de preguntas, que se pueden responder desde diversos enfoques. Por tanto, permite que cada participante lo aborde desde su perfil, preferencias y área de experiencia (interés). Preguntas que tienen una respuesta que no podemos simplemente «copiar y pegar», sino que provocan que activemos el pensamiento, seleccionemos, elijamos, tomemos decisiones, relacionemos y construyamos un discurso único y diferenciado, ofreciendo conclusiones propias y personales, que van más allá de relatar información. Nos exige y estimula a combinar conocimiento, experiencia y reflexión. Preguntas que deben ser contestadas en un tiempo y dinámica definidos (vale, nos saltamos lo del tiempo, pero esto también forma parte de la flexibilidad y adaptación del guía o docente :-))
Cooperación
La propia propuesta exige de cooperación. Si queríamos ofrecer un debate dinámico, claro y de valor, debíamos asegurarnos de no repetir argumentos o puntos de vista. Para ello debíamos coordinarnos y establecer canales de comunicación que nos permitieron contrastar el enfoque que cada una iba a ofrecer, ofrecernos feedback sobre los matices y expresiones para asegurar que el mensaje no quedará difuso, repartir el trabajo y, como no, también apoyarnos y motivarnos y crear un clima que nos dió confianza al entender que nuestro trabajo individual encajaba con el trabajo global.
Diferenciación
Pero cooperar no significa hacer todo entre todos y presentar un producto homogéneo, porque el objetivo nunca debió ser homogeneizar el aprendizaje, sino dispararlo en tantas direcciones como cada alumno lo quiera llevar. El trabajo, enfoque, estilo y contenido que Marta y yo ofrecimos, aún respondiendo a las mismas preguntas y abordando el mismo tema y contenido, ha sido totalmente diferente. Por eso, ambas hemos tenido una experiencia positiva y por eso, son trabajos que no se pueden colocar en un «ranking». Porque el objetivo de Ingrid no era que compitamos. Esto hubiera supuesto ofreceros dos trabajos parecidos que os hubiera aburrido a todos, que no hubiera tenido sentido ni significado ni para nosotras al elaborarlo, ni para todos vosotros al escucharlo. Si en tan solo 2 días ha logrado 1.300 visualizaciones, es porque os está emocionando tanto, que lo estáis difundiendo mucho 🙂
Os emociona, porque antes, a nosotras nos apasionó hacerlo
Nos apasionó porque fue un reto que nos permitió a cada una abordarlo desde su conocimiento previo, experiencia y enfoque. Desde su visión de cómo responder a las preguntas que tan sabiamente nos formuló Ingrid. Los trabajos diferentes solo se pueden valorar en sí mismos, y por tanto, ni Marta ni yo salimos frustradas por lo que no incluimos, sino satisfechas por lo que sí aportamos. Y porque la suma de los dos trabajos, os ofreció a todos una visión más amplia, completa, clarificadora y práctica sobre cómo responder a los alumnos con #altascapacidades, que si solo hubierais recibido uno de los enfoques, o, peor, si ambas hubiéramos concentrado nuestros esfuerzos y energía en hacer una propuesta similar para encajar en algún molde o propuesta «esperada», renunciando a nuestras propias ideas.
Feedback
El feedback ha venido de parte de todos vosotros. Hasta 150 personas nos acompañaron durante la mayor parte de la sesión -e insisto, fue larga-, hasta 72 se quedaron con nosotras hasta el final de la exposición, y 50 aún tuvieron energía para plantear preguntas. Es decir, nuestra exposición generó debate y cuestiones que tuvieron su respuesta, y fueron una nueva muestra de lo aprendido durante todos estos años.
El profesor (o quien hace el papel de guía, como en este caso fue @imgende), no necesariamente es un experto en el tema. Pone el foco en crear el contexto, definir el reto (complejo, provoca una investigación orientada a resolver, reta el pensamiento, permite distintos enfoques y niveles de complejidad), ofrece las herramientas, hace preguntas, y anima el debate. Pues ahí lo tenéis. Cuando nos preguntamos ¿qué necesitan los alumnos con alta capacidad?
Pues la respuesta no es, ni más ni menos que: «docentes que les permitan aprender». Aprender no es escuchar o leer una información para trabajarla con ejercicios mecánicos con el afán de recordarla. Aprender es pensar, aplicar, crear, indagar. Aprender implica curiosidad, pensamiento, imaginación, elegir, tomar decisiones. Aprender implica cooperar con aquellos que te impulsan a ir más lejos. Y necesitan que esto sea así, todo el tiempo lectivo. Al ritmo y nivel de complejidad que su perfil y capacidad requiere. ¿Cómo, si tengo más alumnos en el aula? Fácil. Deja que todos aprendan del mismo modo, deja que ellos elijan cómo abordar el reto a resolver.
Bueno, y sin más dilación, os dejo aquí el enlace al vídeo. Coger papel y lápiz, tomar buenos apuntes y difundir entre vuestros compañeros en el claustro o entre los profesores de vuestros hijos e hijas.
Y si lo quieres disfrutar en podcast, también tienes la opción para que el formato nunca sea una barrera de acceso:
Enlaces
Y como lo prometido es deuda, aquí tenéis todos los enlaces y recursos que compartimos en las #CharlasEducativas, para que tengáis aún más fácil responder a los alumnos con #altascapacidades
Empiezo por el final. El wakelet en el que reuní las conversaciones del #twitterchat de #LaPrimerAACC (pequeño grupo de la 1º promoción del curso de experto en #altascapacidades de la Unir), que estuvo activo durante 3 temporadas, nada menos. Vídeos didácticos (realizados por @Xifo_X), recursos, enlaces, bibliografía, infografías, debate, preguntas y respuestas, organizados por temas alrededor de las altas capacidades y el desarrollo del talento, siempre desde el rigor y abordando los temas con profundidad y responsabilidad.
https://wakelet.com/@aacclarebeliondeltalento
Las altas capacidades y el desarrollo del talento son áreas complejas, como lo es comprender las claves del desarrollo personal, el pensamiento, la creatividad, el potencial, las emociones, la inteligencia, las interacciones… No hay recetas, ni fórmulas, ni un listado de cualidades o una clasificación por tipos. Sobre todo no hay respuestas estandarizadas, porque responder a las altas capacidades, es, sin duda, romper con lo estándar. Por eso, buscar fuentes actualizadas que abordan con rigor la investigación más reciente, es el primer paso, y abordarlas con reflexión, profundidad y sentido crítico, el segundo.
En estas lecturas podrás encontrar gran parte de los fundamentos de todo lo que se habló en la #CharlasEducativas sobre #AltasCapacidades
Aterrizamos las ideas con algunos ejemplos que nos permiten por un lado conocer qué ocurre en su interior cuando nos ofrecen algunas respuestas o comportamiento en el aula que nos resultan «algo a modificar«, como cuando siempre «quieren» responder, o hacen preguntas inusuales o que nos parece que «no tocan», o cuando cuestionan lo que planteamos. Es fácil concluir que lo hacen por «afán de monopolizar» el aula o al grupo, por que son «irreverentes» y quieren «boicotear» la clase, o porque se distraen, no atienden o cualquier otro comportamiento negativo.
Es fácil, pero es ERRÓNEO. Son demasiado pequeños para tener tan «mala idea» como les presuponemos. Ellos están aprendiendo, es decir, implicando curiosidad, interacción, relaciones. Están pensando. Y es algo a lo que no pueden, NI DEBEN, renunciar. ¿Qué hacer? es fácil. Simplemente convierte aprender en una dinámica interactiva que parte de la curiosidad de los alumnos, de sus preguntas, que implica movimientos del pensamiento, observación, relación, argumentación, debate…. para todos.
Aquí van los ejemplos que compartimos en las #CharlaEducativa del día 10:
Morín, ya adulta, recuerda sus años de escuela y cómo se sintió cuando su profesora la amonestó por saber más, preguntar más, hacer más, querer más… Nos dice también qué consecuencias tuvo esto para su futuro personal: Aprendió a no preguntar, a no esforzarse, a no aspirar a aquello para lo que tenía potencial, aprendió a conformarse, a que sus necesidades no son importantes, a orientar su energía y esfuerzo a encajar en lugar de poner el foco en su propio desarrollo.
Josep Maria Turuguet nos relata el recuerdo y reflexiones que le provoca un alumno que tuvo en 6º de primaria, al que no hizo caso cuando expresó, mientras se hablaba de los romanos, que «yo un día vi una reja toda de hierro«. «Había sido víctima de la casposidad académica», dice ahora, ya jubilado.
Él no supo ver que probablemente, tenía ante sí a un alumno con altas capacidades, para él solo era un «bicho raro», y lo era porque «tenía una visión muy personal»
«Él no era ni buen ni mal estudiante, simplemente no lo era, pero estaba allí y era un personaje. A su manera se interesaba por las cosas pero tenía una visión muy personal. Los compañeros se habían acostumbrado a Él como a un bicho raro y los maestros o no podíamos o no sabíamos cómo tratar el caso»
La atención que no presté. Ined 21. Josep María Turuget
Con los años, y seguro que también por estar ya fuera de un entorno que te hace ver todo desde el filtro de lo «normal», lo «estándar» o lo «esperado», sí supo ver que podía haber hecho aquello que todo alumno merece: Escucharle. Prestar más atención. Preguntarse los «por qué«. Atender a esa peculiar forma de ver y entender el aprendizaje, llevará a toda el aula a buscar también ser singular, diferente, reflexivos e incisivos.. ¿o no queremos que esto sea así para todos los alumnos?
El pensamiento complejo y divergente no encaja con un entorno de aprendizaje de memoria, mecánica y repetición, que busca que repitas las palabras, sin poner atención a sus implicaciones ni aplicaciones. Por eso, da igual que se ofrezcamos rincones de «entrenamiento», aulas de «entretenimiento», o mandemos hacer «proyectos de copiar y pegar». No, no me he equivocado al elegir las palabras. Enriquecer no es entrenar procesos de cálculo mental, hacer puzzles, sudokus, cubos de rubik, o problemas de lógica.. eso lo pueden hacer solos en sus casas, si gustan. Investigar no es recopilar cualquier dato sobre cualquier tema, es buscar información PARA solucionar un PROBLEMA. Enriquecer implica: pensamiento, creatividad (solución de problemas complejos), sinergias de desarrollo, interacción, feedback. Para todo lo demás, por favor, «dejemos de molestar»…
Lo digo con esa «mordacidad», porque ayer mismo me llamaba una madre que me decía que hacía apenas unas semanas que su hijo de 9 años ha sido evaluado. La respuesta del colegio ha sido 1) Tiene que aprender a hacer la letra más redonda y 2) Este viernes ha «mandado hacer» un «proyecto» en el que la única instrucción es «sobre España» y «el lunes me lo traes». ¿Tener altas capacidades te quita el derecho a descansar los fines de semana? .. Bueno, este es un ejemplo claríiiisimo de lo que NO HAY QUE HACER bajo NINGUNA CIRCUNSTANCIA. A esto nos referimos cuando decimos: «¡no necesitan más, sino diferente!«
En este artículo relata cómo y por qué, si nuestra práctica educativa pone el foco en el contenido y éste se limita a la «versión» oficial del libro de texto, estamos perdiendo la oportunidad de dejar espacio al verdadero aprendizaje. No, no siempre los países «caben» dentro de los continentes, porque Oceanía «cabe» dentro de Rusia. No, no siempre necesitamos que nos cuenten las cosas para «saberlas», porque la observación, relación y deducción construyeron aprendizaje mucho antes de que las escuelas existieran, y por eso, si impulsamos y guiamos debidamente, los alumnos pueden deducir la relación entre ºF y ºC. No, no pasa nada si mandaste un trabajo sobre el Nilo, y te trae uno sobre el Amazonas, debemos evaluar su desarrollo competencial y si comprende la importancia de los ríos, que es el «nutriente» del aprendizaje.
Este artículo no lo compartí durante la sesión de #CharlasEducativas, pero se me antoja relevante. Hablamos de un mayor nivel de curiosidad, imaginación, capacidad para relacionar, búsqueda de significado profundo, intensidad intelectual, cuestionamiento, vocabulario elevado…. pero «ver» este compartimento en la práctica es lo que nos permite comprender su dimensión. Mafalda nos va ayudar a visualizar estos procesos y yo intentaré orientar sobre cómo responder a estas cualidades en nuestras aulas de hoy.
El artículo es el 4º de una serie que reta y guía para convertir nuestras escuelas en centros de desarrollo del talento. Os dejo el primero de ellos, y al final de cada uno, encontrarás el enlace para seguir el hilo:
Cuando todo funciona ¿funciona?
El «sistema» vs el alumno. Este artículo te puede resultar diferente. A menudo protestamos por todos aquellos que «no se ven» o aún evaluados, no se atienden. Corremos el riesgo de pensar que estamos respondiendo a algunos de ellos, cuando activamos medidas de «enriquecimiento», que haberlas, haylas. Sin embargo, en muchas de estas propuesta no se hace otra cosa que ofrecer al alumno, más, de aquello que ya recibe en el aula, y que no solo no responde a sus necesidades, sino que le puede llevar a aborrecer su propio perfil.
Los alumnos con altas capacidades necesitan 2 tipos de respuesta:
Una, para todos: Un aprendizaje personalizado el 100% del tiempo lectivo. Esto es: parte de su perfil personal, convierte el contenido en un reto complejo a resolver que permite implicar destrezas de pensamiento crítico y creativo y responder desde distintos enfoques niveles de profundidad y complejidad, agrupamientos que les ofrecen sinergias de estímulo y desarrollo y les llevan a implicarse y esforzarse, para que aprender sea una experiencia positiva también para ellos, para que «un año de escolaridad suponga al menos un años de progreso» como nos insta J. Hattie, y para que el «Roi del aprendizaje, sea siempre positivo» como describe David Perkins y un feedback específico que no se limita a valorar si consiguió los objetivos estándar definidos para su «edad», sino que busca llevarle al máximo de su potencial
Cuántas veces asumimos que el trabajo o la respuesta que los alumnos nos ofrecen es siempre la mejor posible. Que el resultado depende solo del potencial. Qué poco conscientes somos del poder que yace en nuestras palabras, en nuestra actitud, es nuestra voluntad por retar y guiar al alumno para llegar más lejos.
En el vídeo «La Mariposa de Austin», sucede todo lo contrario
- El profesor explica qué quiere: un dibujo científico. No un dibujo artístico, sino uno científico
- Los alumnos eligen qué quieren dibujar. La elección es fundamental para asegurarte que estás ofreciendo a cada alumno la oportunidad de rendir al máximo de su potencial, porque él o ella, intuitivamente elegirá aquello que siente que es capaz de hacer, y quiere y está motivado por hacer.
- El trabajo del alumno es considerado un primer paso. Un borrador. Si reflexionamos con sinceridad, todos sabemos que la primera mariposa de Austin se consideraría un trabajo adecuado para la etapa en la que está (¡Year 1 es P5!). La mayoría le pondría una «carita feliz» y archivaría el trabajo, felicitando al alumno por el «esfuerzo». Es decir, enseñamos que tu primer intento, que siempre es aquello que logramos hacer por nosotros mismos, es, al tiempo, el final del recorrido. Eso construye 2 ideas en el alumno: 1) mi capacidad define mi rendimiento 2) el profesor no es un guía, sino tan solo el que evalúa, aquél al que yo tengo que satisfacer
- A partir de este primer borrador, el profesor no le dice qué tiene que hacer, sino que pregunta a toda la clase ¿qué puede mejorar? De forma que lo convierte en una oportunidad para 1) observar en detalle 2) observar de forma crítica 3) evaluar y autoevaluarse 4) desarrollar su capacidad para ofrecer un feedback específico, concreto y positivo 5) reflexionar sobre cuánto somos capaces de mejorar, a través del esfuerzo, la persistencia y la humildad para aprender
Al final, Austin dibuja una mariposa que muchos adultos no serían capaces de dibujar (a la primera). Austin eligió un objetivo. Su profesor no permitió que se quedara por debajo de ese objetivo. El resultado, no es producto de la «capacidad innata o natural» del alumno. Su capacidad, no ha «variado» del primero al sexto dibujo. La diferencia la ha marcado el feedback del docente. Todos los alumnos, y especialmente los alumnos con alta capacidad, porque su potencial suele estar más lejos de lo que consideramos como «criterio estándar de evaluación», necesitan de docentes que les ofrezcan feedback específico para trabajar con ahínco hacia sus propios objetivos.
En las páginas enlazadas a continuación, podéis encontrar el enlace al estudio Delphi sobre personalización del aprendizaje (Feb 2020, Institució Educativa) y artículos sobre aprendizaje personalizado desde el blog de Javier Tourón y otros publicados en este mismo blog, además de recursos para trabajar el pensamiento en el aula.
Recursos para Personalizar el aprendizaje
Recursos para Trabajar el pensamiento en el aula
El otro tipo de respuesta educativa para los alumnos con alta capacidad que debemos activar, se refiere a los servicios adicionales, incluida la aceleración. Estas ideas están desarrolladas en el libro que hemos compartido sobre el modelo SEM de enriquecimiento de Renzulli y Reis. Otras en este artículo de la serie «cómo convertir mi aula en un centro para el desarrollo del talento«, y para profundizar en el concepto y el proceso adecuado para abordar una aceleración, puedes ir aquí:
«No se trata de acelerar, sino de dejar de pisar el freno» (Javier Tourón)
¿Debería acelerar a mi hijo o hija?
Y si crees que todo esto no es posible, que es una utopía, humo, pura teoría, o tan difícil que no puedes abordarlo, te equivocas. Es un proceso más natural, menos artificial, menos encajonado. Es un proceso que tiene que ver más con tu intuición y sentido común, con dejarte fluir, con observar y acercarte a tus alumnos, estimular su natural curiosidad y responder a lo que sucede en el aula.
Y para muestra, todos estos ejemplos reales de aula… y más.. ya sabes, en mi libro 🙂
Salvar las abejas, también en educación especial (o para infantil)
¿Cómo será el hombre del futuro?
Como véis, ser breve significa siempre renunciar a ofrecerte una visión completa, y sin entender el todo, no podemos entender las partes. No es que no sepa sintetizar, lo que no se, o no estoy dispuesta, es a quedarme en la superficie y malgastar la oportunidad y tu tiempo con mensajes «light» de aplauso fácil. Podría seguir, sin duda… pero si has llegado hasta aquí y abordas todo este contenido… ya tienes un buen punto de partida y espero haber despertado tu curiosidad lo suficiente, como para que indagues en todos los recursos de este blog.
Para más profundidad, extensión y fundamento académico, sin duda, escala hasta el blog del profesor Javier Tourón. No hay tema, matiz o aspecto sobre altas capacidades, desarrollo del talento y educación de calidad, que no esté abordado en este espacio con didáctica, profundidad, referencias y pertinencia.
Formación de calidad sobre las altas capacidad hay. Es amplia, extensa, fundamentada y rigurosa. Además está compartida de forma altruista y gratuita, para que se aplique en el aula en beneficio de todos los alumnos. Solo hay que abordarla y respetar el trabajo y esfuerzo que supone investigar y trasladarte tanto como está en nuestras manos. No contribuyas a la falta de respeto que supone copiar o simplificar para convertir años de investigación y experiencia en llamativas frases o simpáticos reels. Gracias.
LA REBELIÓN DEL TALENTO 
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