De ser el «tonto de la clase», a uno de los neurocirujanos de mayor prestigio mundial y candidato a la presidencia del Partido Republicano de los EE.UU, gracias al empeño de una madre y a su propia determinación:
(CNSNews.com) – Durante un discurso en la Universidad de Liberti, el candidato a la presidencia del GOP (Partido Republicano de los EE.UU), el Dr. Ben Carson, dijo que cuando era un niño, sus compañeros de escuela le llamaban tonto, porque era muy mal estudiante: “De hecho era un muy mal estudiante, y todos me llamaban imbécil. Ese era mi apodo, y yo también creía que era un imbécil. Nunca pensé que yo fuera inteligente. Incluso recuerdo un día en el patio de la escuela, en que nos estábamos preguntando quién sería el niño más lento de la escuela. No hubo una gran discusión porque todos estuvieron de acuerdo en que ese sería yo. Pero entonces alguien quiso divagar sobre quién sería el niño más tonto del mundo, y yo dije.. “Esperad un minuto, hay billones de niños en el mundo”, y ellos constestaron, “Si, pero tu eres el más tonto de todos!”.
Carson es hoy un neurocirujano retirado que ha trabajado en el Hospital John Hopkins tras graduarse en la Universidades de Yale y Michigan. Él cuenta que su sueño siempre fue convertirse en un doctor, hasta el punto de que era capaz de sacrificarse y dejarse pinchar, con tal de ir al médico y poder oler el olor de la consulta.
“Había una persona que no pensaba que yo fuera tonto, y esa era mi madre. Ella siempre estuvo segura de que había algo en mi, y siempre me decía – Benjamin, eres demasiado listo para traer estas notas a casa-”. Pero yo seguía trayendo las mismas notas, y ella seguía pensando lo mismo, y ya no sabía qué hacer, y rezaba, y le pedía a Dios que le diera sabiduría para saber qué hacer para hacer que su hijo entendiera la importancia del desarrollo intelectual”.
Carson dice que Dios le dió a su madre finalmente la sabiduría que requería para hacer que él y su hermano leyeran libros y le hicieran un resumen, incluso a pesar de que ella no podía leerlos. “Mi hermano y yo nunca pensamos que fuera nada útil .. ¿Apagar la televisión y hacernos leer para presentarle resúmenes que ella no podía leer? Pero nosotros no lo sabíamos, y ella añadía anotaciones, subrayaba y marcaba los textos, para que nosotros pensáramos que los leía”
La gente me decía “-¡¿Por qué lo haces?. Tu madre siempre estaba trabajando. Ella ni siquiera hubiera sabido si leías esos libros o no!-. Sí, lo hubiera sabido, y además, en aquellos días, uno hacía lo que sus padres le decían. En esos tiempos no habían psicólogos pidiendo que se deje a los niños expresarse a su aire. Simplemente hacías lo que te decían tus padres”.
Carson descubrió a través de la lectura personajes que habían logrado superarse al hacerse cargo de su propio destino. “A medida que leía esos libros, empezaron a ocurrir cosas increíbles. Empecé a darme cuenta, principalmente, según leía historias de personajes que habían alcanzado grandes logros en diversos campos, que la persona que más tiene que ver con lo que te va a ocurrir en la vida, eres tú misma. Nadie más. No es el entorno, no es tu capacidad, eres tú. Y eso me empoderó enormemente. Dejé de escuchar a las personas de mi alrededor – todos esas personas negativas que te dicen que algo no se puede hacer, y empecé a pensar sobre lo que si puede hacerse, y esto provocó una gran diferencia en mi vida“
Una vez entró en la escuela de medicina, Carson fracasó en sus primeros exámenes. Cuando le enviaron al asesor “el miró mi expediente y dijo – Pareces un joven inteligente, hay muchas cosas que podrías hacer fuera de la medicina”. Me aconsejó que dejara la carrera de medicina.
Carson se sintió devastado, volvió a casa y rezó, pidiendo a Dios que le diera sabiduría para saber qué hacer. El estaba asistiendo a muchas clases, pero no estaba aprendiendo nada. Reflexionando, se dio cuenta de que lo que más le había enseñado siempre habían sido los libros, así que tomo una gran decisión, saltarse las aburridas clases y dedicarle el tiempo a aprender de los libros, y así el resto de su carrera de medicina se convirtió en un camino de rosas.
“Cada persona aprende de un modo diferente” indica Carson. “Yo personalmente no aprendo nada de las clases magistrales, pero aprendo mucho leyendo. Y hay otras personas como yo. Otras personas aprenden de los debates. Otras aprenden repitiendo lo aprendido. Otras son muy visuales y necesitan construir una imagen de cada concepto.. de hecho yo soy muy visual, y necesito hacerme “tarjetas flash” de cada cosa que me es útil saber.
Caron alienta a los estudiantes a encontrar la fórmula que funciona para ellos. “Dios nos ha dotado de maravillosos cerebros” y tenemos la obligación de usarlos en el modo que nos es más provechoso.
Traducción del original (no se vierten creencias u opiniones personales):
http://www.cnsnews.com/news/article/melanie-hunter/ben-carson-everybody-called-me-dummy-school
(1) Benjamin Solomon «Ben» Carson, Sr. (Detroit, Míchigan, 18 de septiembre de 1951) es un médico neurocirujano pediatra retirado, psicólogo, filántropo, escritor y político estadounidense. Fue candidato a la nominación republicana en las elecciones presidenciales de 2016. En 2008, fue galardonado con la Medalla Presidencial de la Libertad por el presidente George W. Bush.
Después de pronunciar un discurso ampliamente difundido en el 2013 Desayuno Nacional de Oración de 2013, se convirtió en una figura conservadora popular en los medios de comunicación políticos por sus opiniones sobre temas sociales y políticos.1
Es reconocido por su filantropía, su incursión en el mundo de la neurocirugía y sus actividades dentro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día así como su participación en el partido Republicano. Es también conocido por realizar operaciones de muy alto riesgo, como la separación los gemelos siameses alemanes Patrick y Benjamin Binder en 1987, con un equipo de 70 personas, tras un período de 22 horas.
Ben Carson es autor de varios libros en las que cuenta su historia de superación personal y nos da una lección de vida para enfrentarnos a nuestro futuro con responsabilidad y autonomía. Interesante lectura para todos, pero en especial para jóvenes y adolescentes a punto de definir su futuro:
Manos Prodigiosas : La historia de Ben Carson

Manos prodigiosas por y acerca de Ben Carson, Doctor en Medicina, es el relato inspirador de un chiquillo de un barrio difícil, con bajas calificaciones y poca motivación, que a los treinta y tres años llegó a ser director de neurocirugía pediátrica del Hospital de la Universidad John Hopkins.
En 1987, obtuvo un reconocimiento mundial por su participacion en la primera separacion exitosa de siameses unidos por la parte trasera de su cabeza; una operacion en extremo compleja y delicada que llevo cinco meses de planificacion y veintidos horas de cirugia, incluyendo un plan quirurgico que Carson ayudo a iniciar.
Corre el Riesgo: Aprenda A Identificar, Elegir y Vivir Con los Riesgos Aceptables

«En nuestra cultura de evasion de riesgos, valoramos en alto grado la seguridad. Sin embargo, al aislarnos de lo desconocido, de los riesgos de la vida, nos perdemos la gran aventura de vivir nuestras existencias a su pleno potencial.
Nociones de un hombre cuya vida exhibe de un modo dramático una conexion entre los grandes riesgos y los grandes triunfos, que le ayudarán a desvanecer su temor al riesgo para que pueda sonar en grande, apuntar muy alto, moverse con confianza y cosechar recompensas que nunca imaginó.
Al evadir el riesgo, está tambien evadiendo el pleno potencial de su vida? Al salir de la zona de comfort para abrazar nuestros sueños es como nos desarrollamos plenamente como seres humanos y alcanzamos esa increíble sensación de estar dirigiendo nuestras vidas.
Una fantástica historia de superación personal, de la que podemos extraer varias conclusiones para la educación, en la escuela, y en casa:
- El rendimiento académico no es la medida de la inteligencia. No porque las personas inteligentes no tengan más capacidad para aprender, que la tienen, sino porque la escuela, lineal, auditiva, memorística, repetitiva, académica y dogmática, no esta preparada para dar respuesta a otras formas de aprender o para valorar la divergencia, la creatividad, la innovación. La inteligencia no se expresa de una única forma. El aprendizaje no sucede de la misma forma para todos los niños. Sólo cuando esta premisa diriga la metodología de cada una de nuestras aulas, podremos estar hablando de educación de calidad.
- La percepción que tienen unos padres sobre la verdadera capacidad de sus hijos, debe ser tenida en cuenta, y mucho, por los tutores y profesores, de forma que puedan trabajar de forma cooperativa para encontrar el modo de estimular al niño y sacar a flote todo su potencial. Cuando los padres creen que sus hijos son inteligentes, aciertan en, al menos, un 85% de las veces, tal como muestran diversos estudios llevados a cabo en Estados Unidos.
- La auto-estima y la persistencia son, más allá que otros muchos factores, los mayores dinamizadores del potencial, los mayores motivadores para alcanzar logros y sueños. Trabajar esta autoestima depende mucho de trasmitir un nivel de expectativas elevado y adecuado. Cuando el nivel de exigencia esta por debajo del potencial del menor, éste acabará desaprovechando su potencial. En este caso, fue la madre de Benjamin Carson quien trabajo la autoestima de forma positiva en sus hijos, exigiéndoles en base al potencial que ella estaba segura sus hijos poseían. La escuela y las familias tienen una elevada responsabilidad en esta tarea.
- Por último, y aunque es de vital importancia trabajar por entornos dinamizadores del talento, por maestros capaces de adaptarse a diferentes modos de aprender, aulas que promuevan el pensamiento crítico y la creatividad, al final son nuestras decisiones las que nos llevan por un camino u otro. Somos responsables de nuestro futuro. Del mismo modo, y aunque es fundamental contar con leyes educativas que favorezcan la labor del maestros y recursos adecuados que le permitan realizar su labor con todas las garantías, también es cada maestro de forma individual quien es responsable de la forma en que motiva y estimula a cada uno de sus alumnos.
Madres que dan Alas
Hace poco compartimos con vosotros la historia de Nancy Edison, una madre que creyó en su hijo más allá de lo que los maestros le indicaban. Hoy os traemos la historia de mamá Carsón que a pesar de no saber hleer, sí tuvo la sabiduría de creer en el potencial de sus hijos.
No hay duda de la fuerza que tiene la educación que las familias dan a sus hijos. De las expectativas y valores que los padres inculcan a éstos. Sin embargo, a lo largo de nuestra trayectoría muchas son las quejas de madres obligadas a emprender una lucha titánica para que el potencial de sus hijos sea atendido. No, no vamos a hacer aqui un alegato corporativista a favor de las madres «coraje». Pero sí es necesario que estas historias nos sirvan para reflexionar sobre si no sería adecuado dar un voto de confianza a tantas madres que luchan, que luchamos, porque ese potencial que a veces la escuela no detecta, se atienda.
Podemos discutir si la educación académica debe restringuirse al aprendizaje de datos y conceptos o debe ir más allá y trabajar las habilidades de cada menor para mejor prepararlo como persona. Podemos también discutir sobre si esta preparación debe o no incluir el desarrollo de las habilidades que se demandan profesionalmente o centrarse en aspectos humanos y sociales. Pero no se puede discutir que nada de esto puede suceder si el niño no llega a la escuela con disposición para aprender y aprovechar lo que allí le vayan a ofrecer.
Y promover esta actitud depende, siempre, de un trabajo coordinado familia-escuela.
Maestros que dan Alas
También existen miles de historias similares de maestros que fueron capaces de ver más allá y de cambiar el rumbo de alguno de sus estudiantes en particular, o de un grupo-clase en su conjunto. Maestros hoy anónimos que viven con pasión su profesión y se entregan cada día a sus alumnos.
Y por eso queremos dar voz a todos ellos y os invitamos a enviarnos vuestras historias a yoatiendoeltalento@gmail.com, para que la publiquemos en nuestro blog-maratón de artículos : www.yoatiendolasaaccenelaula.wordpress.com. Nos la podéis contar como padres que habéis vivido esta experiencia, o como profes que os visteis un día retados por un alumno «especial» que lo cambió todo. ¡Animaros!
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